11 de octubre de 2016

La hoja roja

Titulo: La hoja roja
Autor: Miguel Delibes
Año: 1959 (2010)

Editorial: Destino
Temática: Ficción Moderna y Contemporánea
Páginas: 256
ISBN: 978-84-233-2821-5

Sinopsis: La hoja roja es esa llamada prudente que recuerda al fumador el próximo fin de su librillo de papel. Para don Eloy la jubilación ha sido la hoja roja. Le ha llegado el momento de contar con avaricia las hojas que le restan en el librillo de la vida. Don Eloy perdió a su mujer y a sus hijos ―uno muerto y el otro ausente, más lejano por el corazón que por la distancia― y se fueron también los amigos íntimos... Tan sólo cuenta con la Desi, una muchacha de veinte años que se ocupa de las tareas domésticas y cuya mayor ilusión es casarse con un mozo de su pueblo de sangre caliente, llamado el Picaza. El hondo dramatismo que parece conformar a estos personajes y su entrañable desamparo podría hacer pensar en una novela triste. Sin embargo, el humor y la frescura con que Delibes nos acerca al cotidiano devenir del viejo y de su criadita analfabeta hacen de La hoja roja una de las obras más irónicas y divertidas de su autor. Admirablemente escrita y construida, La hoja roja es una novela emocionante, humanísima, donde Miguel Delibes demuestra su extraordinaria capacidad para extraer de la vida diaria los más puros resortes del arte.

  • Por tercera vez en la vida el viejo Eloy se erigía esta noche en protagonista de algo.
  • la jubilación era la antesala de la muerte.
  • Como a través de una niebla oía hablar a su derecha de los platillos volantes y a su izquierda de una revisión de sueldos y jornales
  • En casos así, lo oportuno es dejar hablar al corazón.
  • —Puede que Vázquez exagerase —dijo—, pero de todas maneras a mí me ha salido la hoja roja en el librillo de papel de fumar, eso es.
  • Ocurría, simplemente, que donde no hay no se puede sacar.
  • «Los viejos vivimos del aire, hija, no te preocupes».
  • La maravillaba la extraña capacidad del hombre para atrapar las palabras y fijarlas indefinidamente en un papel,
  • «Daría dos dedos de la mano por aprender a leer, ya ve».
  • uno se enfría, no cuando hace frío sino cuando teme que va a enfriarse, porque el enfriamiento no era problema de temperatura sino, como todas las cosas, problema de sugestión.
  • De joven soñó con la jubilación y ahora, de jubilado, soñaba con la juventud.
  • El tiempo le sobraba de todas partes como unas ropas demasiado holgadas e imaginó que tal vez sus paseos vespertinos con Isaías terminarían por ceñir las horas a su medida.
  • no se consideraba viejo y decía fustigando el aire con su bastoncito: «Andando poquito a poco».
  • «Usted siempre en medio como el miércoles».
  • El viejo había de meterse dentro del fuego para reaccionar.
  • Si cerraba los ojos, era como si aventase los últimos doce lustros de su vida.
  • Alguna noche, si veía abrirse el cielo con la estela de una estrella, decía para sí con gran fervor: «¡Que me quiera el Picaza!
  • Su relación estaba hecha de silencios y acuerdos tácitos.
  • Los árboles, sacudidos por el viento, semejaban una zarabanda de esqueletos sobre una brillante alfombra de hojas amarillas.
  • La vida en la pequeña ciudad se resumió en sí misma, como el caracol en su concha, aguardando mejor circunstancia para renacer.
  • la vida es una sala de espera y que como en las salas de espera hay en la vida quien va de la Ceca a la Meca para aturdirse y olvidarse de que está esperando.
  • Un día se le ocurrió que los viejos se ponen al sol porque ya llevan el frío de la muerte dentro.
  • Una de las cosas a olvidar era, por ejemplo, el asunto de las fotografías; otra, el perdido calor de la Corporación; otra más, la hoja roja del librillo de papel de fumar;
  • Mandaba en todo menos en el destino.
  • Las campanas empezaron a dialogar vivamente por encima de los tejados brillantes de escarcha.
  • «Lo quiera o no, me ha salido la hoja roja en el librillo de papel de fumar. Es un aviso».
  • «Eloy, no es lo mismo decirle a una mujer “vida mía” que “mi vida”».
  • —¿Quién va deprisa, señorito?
    —Todos, hija; parece como que tuvieran miedo de no llegar.
  • Argimiro veía la paja en el ojo ajeno y no veía la viga en el suyo
  • si no se anda con ojo, se va a encontrar con lo que no busca.
  • «Él ve algo y a mí no me oye. Lo que Isaías vea ahora está del otro lado».
  • la vida era un soplo pero que los hombres se llenaban de codicia como si hubieran de ser eternos.
  • le oprimía el olor de la carbonilla que ella identificaba con los adioses y las separaciones.
  • la vida era una sala de espera y que todos andamos aguardando, intentando distraernos, y no atendemos cada vez que dicen: «¡El siguiente!», porque nos asusta pensar que un día el siguiente seremos nosotros,
  • El tiempo se va sin sentir, ni te das cuenta.
  • Puesta en pie, miró dócilmente al viejo, que también se había levantado, y sus ojos se llenaron de agua. Dijo apenas con un hilo de voz:
    —Como usted mande, señorito.


Una novela sobre el paso del tiempo, una metáfora sobre la vejez, un retrato emotivo del inicio de un final.
3/5
  • Lo mejor: Nostálgica; reflexiva.
  • Lo peor: Tediosa; figuras repetitivas.
  • ¿Os han gustado las frases?

    21 comentarios:

    1. Este libro es posible que lo lea, porque leí "El camino" cuando estaba en el instituto y me pareció una gran historia. Aunque a muchos de mis compañeros de clase les aburrió, jaja. La verdad es que siempre he ido al revés del mundo xD
      Pero tengo ganas de repetir con el autor :)

      Besos!

      ResponderEliminar
    2. Hola!!
      Pues de momento no creo que lo lea, gracias por la reseña
      Un saludo :)

      ResponderEliminar
    3. Tengo "El camino" en casa esperando así que si disfruto con el autor no me importaría leer esta, los libros en los que la temática es la vejez me gustan mucho.

      Besitos

      ResponderEliminar
    4. Hola guapa!
      No he leído el libro, pero por las frases que has puesto pinta genial. Besotes

      ResponderEliminar
    5. Hay buenas frases. Siempre quiero leer algo de Delibes y nunca encuentro el momento ...

      bsos!

      ResponderEliminar
    6. Hola! que fuertes algunas frases :( la verdad no conocía el libro, pero me quedo con muchas ganas de leerlo. Sin dudas la que más me chocó fue "la jubilación era la antesala de la muerte." porque mi abuelo está pasando por esa etapa y está bastante deprimido, supongo que el prota pasa por lo mismo... un beso enorme y nos leemos!♥

      ResponderEliminar
    7. Un autor que me gusta mucho, pero este libro aún no lo he leído.
      Besotes!!!

      ResponderEliminar
    8. ¡Holaa! Pues tiene un título interesante, y sí que da curiosidad, así que a ver si me termina de convencer ;)
      ¡Beesos! :3

      ResponderEliminar
    9. Si es de Delibes, me la llevo apuntada. Me gusta bastante. Un beso.

      ResponderEliminar
    10. No sé si me animaré con ella, pero gracias por compartirla :-)
      Besos.

      ResponderEliminar
    11. Me gusta mucho la moraleja que puede sacarse de este libro pero no se si sería un buen libro para el momento en el que me encuentro... Así que por el momento lo tendré presente pero no me embarcaré en sus páginas...

      ¡SE MUUY FELIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIZ 😊😊💕!

      ResponderEliminar
    12. Leí este libro hace muchos años y lo disfruté muchísimo.
      Besos.

      ResponderEliminar
    13. Hola
      Mira que he leído a grandes autores en el instituto, pero a Delibes nunca. No descarto nada,aunque ahora no me atraiga.
      Besos.

      ResponderEliminar
    14. no lo conocia! tampoco he leido nada de el, no es un autor que me llame demasiado!!

      un besito!!!

      ResponderEliminar
    15. No conocía este libro de Delibes pero tiene muy buena pinta.
      Besos

      ResponderEliminar
    16. Este libro no lo conocía pero creo que sería demasiado triste y eso me echa para atrás.

      Besos =)

      ResponderEliminar
    17. Hola!! No conocía el libro, y la verdad es que puff, no me llama mucho, aunque el tema que trate me guste. Eso que sea tedioso...puufff un besazo

      ResponderEliminar
    18. No me llama la atención ni tampoco es mi tipo de lecturas así que lo dejo pasar. Un beso

      ResponderEliminar
    19. Hola. De momento lo dejare pasar porque no me atrae demasiado sus frases. Besos.

      ResponderEliminar
    20. Las frases no están mal, pero el libro no me acaba de convencer...
      Un beso :D

      ResponderEliminar
    21. Me impresionó por la forma de mostrar la decadencia y la tristeza pero me gustó muchísimo.
      Abrazo!

      ResponderEliminar