El resplandor

Titulo: El resplandor
Autor: Stephen King
Año: 1977 (2012)
Traducido por: Marta I. Guastavino

Editorial: Debolsillo
Temática: Cuentos de Terror y Fantasmas
Páginas: 656
ISBN: 978-84-9989-927-5

Sinopsis: REDRUM. Esa es la palabra que Danny había visto en el espejo. Y, aunque no sabía leer, entendió que era un mensaje de horror. Danny tenía cinco años, y a esa edad poco niños saben que los espejos invierten las imágenes y menos aún saben diferenciar entre realidad y fantasía. Pero Danny tenía pruebas de que sus fantasías relacionadas con el resplandor del espejo acabarían cumpliéndose: REDRUM... MURDER, asesinato. Pero su padre necesitaba aquel trabajo en el hotel. Danny sabía que su madre pensaba en el divorcio y que su padre se obsesionaba con algo muy malo, tan malo como la muerte y el suicidio. Sí, su padre necesitaba aceptar la propuesta de cuidar de aquel hotel de lujo de más de cien habitaciones, aislado por la nieve durante seis meses. Hasta el deshielo iban a estar solos. ¿Solos?

• Menudo empleaducho engreído, pensó Jack Torrance.
• Algunas camareras de la tercera planta aseguran que han oído ruidos ahí arriba.
• La soledad en sí misma puede ser peligrosa.
• pueden llevar al asesinato por motivos tan triviales como una comida quemada o una discusión sobre a quién le toca lavar los platos.
• Y para colmo se queda sin teléfono y el viento le tira la antena de televisión y no puede hacer nada más que pensar
• Los recuerdos no dejaban de acecharle.
• una bombilla de 60 vatios arrojó un resplandor enfermizo y vacilante sobre la estancia,
• Habla como un libro. Admiro a la gente así,
• La oscuridad estaba surcada por una blancura acechante,
• el bar, donde oscuras sombras inmóviles saboreaban las aguas del olvido,
• El viento suspiraba entre los árboles, y las hojas caídas crujían por las aceras desiertas
• la adulación es lo que engrasa las ruedas del mundo.
• La llama azul cobró vida y él la bajó con delicadeza hasta reducirla a un tenue resplandor–.
• –Tienes un don –le explicó Hallorann, volviéndose hacia él–. Siempre lo he llamado el «esplendor»,
• el silencio del lugar, que se había abatido sobre el hotel como una densa manta.
• el sol parecía dormir entre dos picos de sierra, y arrojaba una luz dorada sobre las laderas de roca
• había algo que parecía pintura roja o... sangre.
• estaba cerrando lentamente una puerta que daba a una habitación llena de monstruos.
• Wendy sintió que un dedo de hielo le tocaba el corazón.
• Quiero que enciendas la luz de la lamparilla.
• las imágenes se desvanecieron y cayeron sobre él como una oscura inundación.
• Dios mío, ¿alguna vez dejan de doler las viejas cicatrices?
• Cuando un adulto ve cosas inexistentes, lo consideramos listo para que lo metan en una habitación de paredes acolchadas. Cuando un niño dice que vio un duende en el dormitorio o un vampiro al otro lado de la ventana, nos limitamos a sonreír con indulgencia.
• Si todos los hoteles tenían un fantasma, el Overlook sin duda tenía todo un aquelarre de ellos.
• Finalmente pasó la página y tragó saliva con un chasquido en la garganta.
• intentó espiar por el ojo de la cerradura,
• Lo perseguía, y de pronto le pareció que la escalera se alejaba a medida que corría hacia ella.
• Siempre seremos amigos, y si ahora te pongo un collar de perro, siempre fingiremos no verlo por tácito acuerdo,
• Lo único que te pido a cambio es el alma,
• Tenso como las cuerdas de un piano, se quedó mirando la oscuridad,
• permanecieron inmóviles, mirando cómo oscilaba el resplandor de las brasas en el fuego.
• «Este lugar inhumano hace monstruos de los humanos.»
• no quedó despierto más que el viento, lanzándose contra el hotel y silbando en los aleros, bajo la mirada fría y penetrante de las estrellas.
• –Aquí viene el gigante a comeros en vuestra cama. Ya podéis despediros de la vida.
• Incluso le pareció distinguir unos ojos entre el follaje. Unos ojos que lo miraban.
• la curiosidad era como un anzuelo constante en su cerebro, una especie de obsesionante canto de sirena que no se dejaba apaciguar.
• «Cierra los ojos, y desaparecerá»
• La puerta estaba entreabierta y...
• Fuera lo que fuera, estaba allí dentro, en el cuarto de baño.
• como si fuera a ver algo hermoso cuando apartara la cortina de la ducha,
• Luego se hundió en la oscuridad de su ser como una piedra en un pozo.
• Los ojos eran dos ventanas enjabonadas.
• ¿A qué agujero se había asomado su hijo, a qué oscura madriguera?
• Los dos podíamos hablar sin tener que abrir la boca.
• –Voy a subir a esa habitación. ¿Qué creías que iba a hacer? ¿Preparar café?
• Un dedo gélido le oprimió suavemente la base de la columna, provocándole un escalofrío.
• Había algo detrás de la cortina de plástico rosado. Había algo en la bañera.
• Podía sentir el gusto del terror en el fondo de la garganta, como un sabor de cerezas pasadas.
• ¿Oía pasos que se aproximaban a la puerta, o sólo los latidos de su corazón?
• Si abría los ojos y veía moverse el picaporte se volvería loco, así que los mantuvo cerrados
• Hay alguien más aquí con nosotros.
• De un extraño puedes alejarte, pero de ti mismo no.
• en la oscuridad de la habitación veía los leones del cerco amontonándose junto al camino. Gotas de sudor frío le cubrieron la frente.
• parecidas a ojos eran las ventanas: reflejaban la luz del sol mientras guardaban dentro su propia oscuridad.
• el pánico más absoluto le heló el cerebro y lo dejó incapaz de pensar.
• Aquí dentro hay algo conmigo.
• En cualquier momento sentiría sobre el tobillo una mano helada...
• Tras él oyó un golpe suave de algo al caer.
• Sálvame, y si no puedes, por lo menos ven a jugar conmigo.
• Se aferró a los hilos de la realidad y los sujetó con firmeza.
• –¿Qué es eso? –Fría como el mármol, la mano de ella le cogió la muñeca.
• –Tal vez sea un cortocircuito. Lo comprobaré.
  –Jack, ¡no salgas de esta habitación!
• la palabra REDRUM, y al verla reflejada del revés en el cristal, pudo deletrear: MURDER.
• algo lo acechaba desde las tinieblas, una criatura enorme, aterradora, que había rezumado entre el maderamen al apagarse las luces.
• El terror se apoderó de él cuando ella abrió los ojos,
• en la oscuridad, detrás de sus párpados, eso que lo perseguía en sus sueños a través de los oscuros pasillos del Overlook apareció.
• Aferró con más fuerza el mango del cuchillo y miró por encima del mostrador.
• Súbitamente tuvo la sensación de que alguien estaba de pie detrás de ella,
• Vivir del propio ingenio es saber siempre dónde están las avispas.
• Por un momento tuvo la sensación de que la muerte misma estaba del otro lado de esa puerta.
• Se quitó las manos de la cara y abrió cautelosamente los ojos. Nada...
• al mirar a la ventana oscurecida por la noche, vio un horrible rostro blanco,
• Lentamente abrió la puerta.
• El viento aullaba y rugía. El faro perforaba la oscuridad.
• Se dio cuenta de que algo se movía delante de él, en la oscuridad.
• Estaba perdido en la oscuridad.
• Como una garra, el pánico le oprimió el corazón.
• El aliento se le heló en la garganta. Había algo... o alguien, acurrucado contra la pared,
• Había dejado de nevar, y una luna como una moneda de plata se asomaba a espiar entre las nubes deshilachadas.
• La larga oscuridad había terminado.
• Las lágrimas que curan son también las lágrimas que queman y mortifican, se dijo.
• El mundo no te quiere, pero tu madre y yo sí te queremos.
• Ésa es tu misión en este mundo difícil, mantener vivo tu amor y seguir adelante, no importa lo que pase. Rehacerse y seguir, nada más, eso es todo.
• Wendy se sentó junto a su hijo y los tres permanecieron en el extremo del muelle, bajo el sol de la tarde.

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Una novela terrorífica, brillante, resplandece por si sola.

5/5

Lo mejor: La ambientación; la tensión; los animales del seto; la habitación 217.

Lo peor: El spoiler en la sinopsis.

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