12 de mayo de 2014

1984

Titulo: 1984
Autor: George Orwell
Año: 1949 (2013)
Traducido por: Miguel Temprano García

Editorial: Debolsillo
Temática: Ficción Moderna y Contemporánea
Páginas: 352
ISBN: 978-84-9032-507-0

Sinopsis: En el año 1984 Londres es una ciudad lúgubre en la que la Policía del Pensamiento controla de forma asfixiante la vida de los ciudadanos. Winston Smith es un peón de este engranaje perverso, su cometido es reescribir la historia para adaptarla a lo que el Partido considera la versión oficial de los hechos... hasta que decide replantearse la verdad del sistema que los gobierna y somete.

  • Era un día frío y luminoso de abril y los relojes estaban dando las trece.
  • En cada rellano, enfrente del hueco del ascensor, el cartel con el rostro gigantesco le contempló desde la pared. Era uno de esos carteles pensados para que los ojos te sigan cuando te mueves. «El Hermano Mayor vela por ti», decía el eslogan al pie.
  • LA GUERRA ES LA PAZ
    LA LIBERTAD ES LA ESCLAVITUD
    LA IGNORANCIA ES LA FUERZA
  • Con letra pequeña y torpe escribió: «4 de abril de 1984».
  • Se recostó en la silla. Sintió una impotencia absoluta. Para empezar, ni siquiera sabía con certeza si de verdad estaban en 1984.
  • Fue como si sus mentes se abrieran y sus pensamientos pasaran del uno al otro a través de los ojos.
  • «Nos encontraremos donde no hay oscuridad».
  • Al futuro o al pasado, a un tiempo en el que el pensamiento sea libre, en el que los hombres sean diferentes unos de otros y no vivan solos... a un tiempo en que la verdad exista y lo que se haga no se pueda deshacer.
  • Era uno de esos sueños que, pese a conservar un ambiente onírico característico, son una continuación de la propia vida intelectual, y en los que uno comprende hechos e ideas que siguen pareciendo nuevos y valiosos después de despertar.
  • «Quien controla el pasado —decía la consigna del Partido— controla el futuro. Quien controla el presente controla el pasado.»
  • Lo único que se necesitaba era una interminable serie de victorias sobre tu propia memoria. Lo llamaban «control de la realidad» y, en nuevalengua, «doblepiensa».
  • Todo se difuminaba en un mundo de sombras en el que incluso la fecha de los años se había vuelto poco fiable.
  • Hasta que no tomen conciencia no se rebelarán, y sin rebelarse no podrán tomar conciencia.
  • La vida, si mirabas a tu alrededor, no se parecía a las mentiras que brotaban de las telepantallas ni a los ideales que estaba intentando imponer el Partido. Gran parte de ella, incluso para los miembros del Partido, era neutral y apolítica, consistía solo en sudar tinta en trabajos horribles, en pelearse para encontrar sitio en el metro, en remendar un calcetín agujereado, en gorronear una tableta de sacarina y en guardar una colilla.
  • «Entiendo CÓMO, no entiendo POR QUÉ».
  • lo terrorífico no era que te mataran por pensar de otra manera, sino que era posible que tuviesen razón. Pues, después de todo, ¿cómo sabemos que dos y dos son cuatro? O que la fuerza de la gravedad actúa. O que el pasado es inalterable. Si tanto el pasado como el mundo externo existen solo en la mente y esta es controlable... ¿qué nos queda?
  • La libertad consiste en poder decir que dos y dos son cuatro. Admitido eso, se deduce todo lo demás.
  • Pensó con una especie de perplejidad en la inutilidad biológica del miedo y el dolor, la traición del cuerpo humano que siempre se queda paralizado en el preciso instante en que es necesario hacer un esfuerzo especial.
  • en los momentos de crisis uno nunca lucha contra un enemigo externo, sino contra su propio cuerpo.
  • la vida es una lucha momentánea contra el hambre, el frío o el sueño, contra un dolor de estómago o de muelas.
  • en los dos o tres segundos en que había ayudado a levantarse a la chica ella le había deslizado algo en la mano.
  • En él estaba escrito con letra grande e informe: «Te quiero».
  • Pero la dificultad física de verla era enorme. Era como intentar mover una ficha de ajedrez después de un jaque mate.
  • Winston recorrió el camino moteado de luces y sombras, atravesó charcos de oro allí donde se apartaban las ramas. Debajo de los árboles, a su izquierda, el terreno estaba cubierto de campanillas azules. El aire parecía besarle la piel.
  • —¿Podrás creer —dijo— que hasta este momento no he sabido de qué color eran tus ojos?
  • Dejó de pensar y se limitó solo a sentir.
  • Mientras los seres humanos sigan siendo humanos, la muerte y la vida serán la misma cosa.
  • La intimidad, dijo, era algo muy valioso.
  • Llegar allí era difícil y peligroso, pero la habitación era un santuario. Igual que cuando Winston se había quedado mirando el interior del pisapapeles con la sensación de que sería posible introducirse en aquel mundo cristalino, y de que una vez dentro el tiempo se detendría.
  • Era un sueño vasto y luminoso en el que toda su vida parecía extenderse ante él como un paisaje una tarde estival después de la lluvia.
  • —No me refería a confesar. La confesión no es una traición. Lo que hagas o digas carece de importancia: lo único que importa son los sentimientos. Si lograsen que dejara de quererte... eso sería una auténtica traición.
  • Podían averiguar hasta el último detalle de lo que habías hecho, dicho o pensado; pero el interior de tu corazón, cuyo funcionamiento era un misterio incluso para ti, seguía siendo inexpugnable.
  • La guerra es un modo de hacer pedazos, lanzar a la estratosfera o hundir en las profundidades del mar materiales que podrían utilizarse para mejorar la vida de las masas y por tanto, a largo plazo, volverlas más inteligentes.
  • En la filosofía, la religión, la ética o la política, dos y dos podían sumar cinco, pero al diseñar un cañón o un aeroplano tenían que sumar cuatro.
  • Los mejores libros, comprendió, son los que te cuentan lo que ya sabías.
  • la desigualdad era una ley inalterable de la vida.
  • La invención de la imprenta, no obstante, facilitó la manipulación de la opinión pública, y el cine y la radio acentuaron ese proceso.
  • El pasado es lo que dicen los archivos y la memoria de la gente.
  • Los que más firmemente creen en la conquista del mundo son precisamente quienes saben que es imposible.
  • Un rayo amarillo del sol poniente entraba inclinado por la ventana y caía sobre la almohada. Cerró los ojos. El sol en la cara y el cuerpo suave de la chica en contacto con el suyo le produjeron sueño, fuerza y confianza. Estaba a salvo, todo iba bien. Se quedó dormido murmurando «la cordura no es estadística», convencido de que la frase contenía una profunda sabiduría.
  • La mística reverencia que sintió por ella se mezcló con la apariencia del cielo pálido y sin nubes, que se extendía más allá de las chimeneas a una distancia interminable. Era curioso pensar que el cielo fuese igual para todos,
  • —¿Quién te denunció? —preguntó Winston.
    —Mi hija pequeña —respondió Parsons con una especie de triste orgullo—. Me espió por el ojo de la cerradura.
  • La realidad existe solo en la imaginación. Aunque no en la imaginación individual, que es falible y perecedera, sino en la del Partido, que es colectiva e inmortal.
  • Estarás hueco. Te estrujaremos hasta vaciarte y luego te llenaremos de nosotros.
  • —¿Existe el Hermano Mayor?
    —Pues claro. El Partido existe. El Hermano Mayor es la encarnación del Partido.
    —¿Existe del mismo modo en que existo yo?
    —Tú no existes —respondió O’Brien.
  • «La libertad es la esclavitud». ¿Nunca te has parado a pensar que la frase es reversible? La esclavitud es la libertad. El ser humano siempre acaba siendo derrotado cuando está solo y es libre. Es inevitable que sea así, porque todo ser humano está condenado a morir, lo cual es el mayor de los fracasos.
  • —Controlamos la materia porque controlamos la mente. La realidad está en el interior del cráneo.
  • —¿Qué son las estrellas? —preguntó con indiferencia O’Brien—. Pequeñas llamaradas a unos cuantos kilómetros de aquí. Si se nos antojara, podríamos alcanzarlas. O borrarlas del firmamento.
  • El poder consiste en hacer pedazos el espíritu humano y darle la forma que elijamos.
  • Si quieres hacerte una imagen del futuro, imagina una bota aplastando una cara humana... eternamente.
  • —Dime una cosa —preguntó—, ¿cuándo me matarán?
    —Puede que aún tarden mucho —respondió O’Brien—. Eres un caso difícil. Pero no pierdas la esperanza. Todo el mundo se cura, antes o después. Al final, te mataremos.
  • Todo lo que sucede está en la imaginación. Y lo que ocurre en la imaginación de todos ocurre realmente.
  • si uno quiere guardar un secreto debe ocultárselo también a sí mismo.
  • Morir odiándolos, en eso consistía la libertad.
  • Desde el principio del mundo, en ningún problema de ajedrez han ganado las negras. ¿No simbolizaba eso el eterno y constante triunfo del Bien sobre el Mal? El rostro gigantesco le devolvió la mirada, lleno de calma y poder. Las blancas siempre ganan.
  • «No se pueden meter en tu cabeza», le había dicho Julia.
  • Bajo las ramas del castaño te vendí y me vendiste.
  • Alzó la vista hacia el rostro gigantesco. Cuarenta años había tardado en entender la sonrisa que se ocultaba tras el bigote negro. ¡Qué malentendido tan cruel e innecesario! ¡Qué exilio tan obcecado se había impuesto a sí mismo de aquel pecho amoroso! Dos lágrimas perfumadas de ginebra le rodaron por la nariz. Pero todo había acabado bien, la lucha había concluido. Se había vencido a sí mismo. Amaba al Hermano Mayor.

9 comentarios:

  1. Solo he leído las cinco primeras porque tengo este libro en la estantería y no quiero hacerme spoilers, pero están genial. Qué ganas >.<

    Un beso!

    ResponderEliminar
  2. No había oído hablar de él pero no tiene mala pinta, voy a investigar ^^

    Besos

    ResponderEliminar
  3. He oído mucho sobre este libro y tiene muy buenas críticas así que espero leerlo pronto :3 Un besin :D

    ResponderEliminar
  4. Tengo este libro en mi lista de pendientes y tengo planeado leerlo pronto!

    Un beso!

    ResponderEliminar
  5. Hola!
    Me muero de ganas de leerlo, lo tengo en mi lista de deseos :)

    Un beso ^^

    ResponderEliminar
  6. Ohoh muy buen blog, me gustan muxhas frases de muy buenos libros que publican en este blog ! :)

    ResponderEliminar
  7. Anónimo30/5/14

    Este libro es brillante....

    ResponderEliminar
  8. Me hace acordar estos tiempos!!!

    ResponderEliminar
  9. Es un libro muy profundo y me parece que tiene un final bastante triste.Lo hace un libro muy bueno.

    ResponderEliminar